miércoles, 7 de enero de 2009



Su corporeidad es muy particular “sensible y fluida, puede ser moldeada por cosas tan tenues como el pensamiento”. Así pues, la apariencia de los seres feéricos reflejará con frecuencia las ideas preconcebidas que de ellos tengamos”. “Por razón de la naturaleza de su estructura etérea, el hada puede variar de tamaño a voluntad”. “Para adoptar una nueva forma, el hada ha de concebirla con claridad y fijarla firmemente en su conciencia, pues tan pronto como abandona la idea, vuelve a su primitivo estado normal”.

En opinión de los teósofos, que se han ocupado de investigar el tema: ”la función general de las hadas es absorber PRANA o vitalidad del sol y distribuirla entre lo físico”. O sea, que viene a ser un enlace entre el mundo invisible y el mundo visible.

¿Cómo nacieron las Hadas?...:La sustancia que las anima es, en sí misma su fuente de creación, ahora, existen muchas versiones referentes al nacimiento de las Hadas, unas modernas y otras antiguas, muy antiguas.

En tiempos pretéritos, pero cristianizados, se afirmaba que las Hadas eran ángeles caídos o bien paganos muertos y por ello no aptos ni para subir al cielo ni para descender al infierno por lo que estaban obligados a vivir por toda la eternidad en las oscuras regiones del “reino intermedio”, es decir, nuestra Tierra.

Los escandinavos cuentan de forma mitológica, que fueron los gusanos que surgían del cuerpo muerto del gigante Imir, los que se convertían “en elfos claros, las elfinas, y en elfos oscuros. Las elfinas viven en el aire, los elfos oscuros en el subsuelo.

Según se puede apreciar, el norte de Europa sabe de las Hadas, así como las Islas Británicas, pero de igual manera no son ignoradas en Alemania ya que allí se las conoce bajo el nombre de Nornes, hilanderas al estilo de las Parcas griegas, y a las que podríamos denominar como una suerte de “madres” de las Hadas, su fuente creadora.

Estas Hadas son las que en el nacimiento de los niños, se acercan a sus cunas para concederles dones o maleficios, en virtud de cómo sean estas Hadas buenas o malas, que las hay, y entonces se conocen bajo el nombre de brujas.

En Francia nos encontramos con el Hada Abonda o Abonde, que procura abundancia. En Italia con Aia o Ambriane, Hada que pertenece al grupo de las llamadas Damas Blancas. Sin movernos de Italia, nos tropezamos asimismo con la famosa Befana que trae regalos a los niños por Navidad, fórmula que se repite en Francia con el Hada Arie. En Venecia tenían a la Dona Bruta y en Brescia a la Besola.

En España, en Catalunya, en la reserva forestal del Montseny, existe un lago en el cual, las noches de luna llena, se afirma que salen de sus aguas las Hadas para bailar al claro de luna; hay quien asegura haberlas visto.

No hay comentarios:

Publicar un comentario